¿Puede perderse la ciudadanía italiana adquirida por matrimonio?

Obtener la ciudadanía italiana por matrimonio es una meta importante para muchas personas que deciden unirse legalmente a un ciudadano o ciudadana italiana. Sin embargo, una vez concedida, surge una pregunta muy común: ¿es posible perder la ciudadanía italiana obtenida por esta vía? En este artículo analizamos las situaciones en las que podría revocarse, qué dice la ley y qué precauciones deben tomarse para conservarla.

¿Qué dice la legislación italiana sobre la ciudadanía por matrimonio?

La ciudadanía italiana por matrimonio está regulada por la Ley nº 91 del 5 de febrero de 1992, que establece los requisitos, plazos y procedimientos para obtenerla. Según esta ley, el cónyuge extranjero de una persona italiana puede solicitar la ciudadanía tras dos años de matrimonio si reside en Italia, o tres años si vive en el extranjero. Estos plazos se reducen a la mitad si la pareja tiene hijos en común.

Una vez concedida, la ciudadanía tiene valor pleno y permanente, pero existen circunstancias excepcionales que pueden llevar a su pérdida o revocación.

¿En qué casos se puede perder la ciudadanía italiana por matrimonio?

Aunque no es común, la pérdida de la ciudadanía italiana adquirida por matrimonio puede darse en las siguientes situaciones:

1. Fraude o matrimonio simulado

Si se demuestra que el matrimonio fue celebrado con el único propósito de obtener la ciudadanía, sin una relación conyugal real, el Estado italiano puede revocar la ciudadanía. Este tipo de fraude es considerado grave y puede acarrear sanciones adicionales, como la expulsión del país en casos de residencia en Italia.

2. Ocultación de antecedentes penales

Durante el proceso de solicitud, se exige que el solicitante no tenga condenas penales graves y que presente certificados de antecedentes de todos los países donde haya residido. Si se descubre posteriormente que el solicitante ocultó información relevante o presentó documentos falsos , la ciudadanía puede ser revocada.

3. Pérdida voluntaria de la ciudadanía italiana

La persona que ha adquirido la nacionalidad italiana por matrimonio puede renunciar voluntariamente a ella si así lo desea. Esta renuncia debe hacerse formalmente ante el consulado o ante las autoridades italianas competentes. Es una situación poco habitual, pero legalmente posible.

4. Divorcio o separación (¿afecta a la ciudadanía?)

Una duda común es si divorciarse del cónyuge italiano implica automáticamente la pérdida de la ciudadanía adquirida. La respuesta es no . Una vez obtenida, la ciudadanía italiana es definitiva, incluso si el matrimonio se disuelve posteriormente. El divorcio no tiene efecto retroactivo sobre la nacionalidad.

No obstante, si el divorcio se produce antes de que se haya completado el proceso, puede detener o invalidar la solicitud si aún está en trámite.

Conclusión: la ciudadanía italiana por matrimonio es estable, pero no absoluta

En general, la ciudadanía italiana adquirida por matrimonio no se pierde por causas personales como el divorcio, pero sí puede revocarse en casos de fraude, falsedad documental o renuncia voluntaria. Por eso, es fundamental seguir el procedimiento legal con honestidad y presentar documentación veraz.

Obtener una segunda nacionalidad es un derecho, pero también una responsabilidad. Si actúas con transparencia, no hay nada que temer: tu ciudadanía italiana será válida y duradera.